El politécnico grancolombiano se unió como aliados del Festival Música del Caribe para fomentar la diversidad cultural y el talento artístico
Bogotá, septiembre de 2023. - El esplendor y la riqueza cultural del Festival Música del Caribe que se realizará del 13 al 16 de septiembre, en Bogotá, tendrá el complemento de actividades artesanales, culinarias, empresariales y de tendencias de moda.
El certamen se efectuará el Coliseo MedPlus de la capital colombiana, ubicado
en la Calle 80, KM 1.5, Vía Cota, el cual se transformará en el epicentro de
una celebración enriquecedora para todos los asistentes. Este evento se erige como un tributo vibrante
a las raíces y tradiciones del Caribe.
Con la determinación de crear una experiencia inolvidable, el Politécnico
Grancolombiano se unió como aliado del festival, gracias al interés común
de fomentar la diversidad cultural y el talento artístico en todas sus
manifestaciones, con un claro enfoque inclusivo, brindando visibilidad a
personas con discapacidad auditiva y motora, así como a mujeres de tallas
grandes, quienes serán protagonistas en los desfiles de moda.
Este evento presentará una mezcla de actividades artesanales,
culinarias, empresariales y de moda. El Poli se une con su amplia experiencia
en el sector de la moda y la sostenibilidad, liderando el desfile que se
realizará el 13 de septiembre, a partir de las 4:00 p.m. El Poli presentará
colecciones diseñadas y confeccionadas por futuros diseñadores.
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Luis E. Taboada Rojas |
Luis Enrique Taboada,
Coordinador del programa, destacó: "en el Festival Música del Caribe,
podrán vislumbrar propuestas innovadoras, reviviendo muchas de nuestras
técnicas ancestrales. Veremos trabajos de tintura, acción botánica, técnicas
como el tejido de hamacas, tejidos de lana, materiales no convencionales a
partir de desechos y una colección que abordará temas como la ansiedad y la
depresión y mucho más".
Estas colecciones son muestra de las tendencias de moda que se esperan
para el 2025, que van a estar marcadas por mucho de lo que dejó la pandemia en
cambios del comportamiento de las personas, en las necesidades y lo que la
gente quiere. Por eso, buscan la conexión con el ser, con el renacer, con el
reconocimiento del individuo como persona, de cómo quiere verse y cómo quiere
sentirse. También se verá cómo la tecnología se involucra con las prendas y
cómo el futuro se involucra desde el ser.
El Festival Música del Caribe 2023 es un acontecimiento trascendental que destaca la herencia cultural del
Caribe a través de la moda, la música, la gastronomía, las artesanías y mucho
más. La alianza con el Politécnico Grancolombiano subraya el compromiso con
estos valores y asegura que este evento emblemático no solo sea un festival,
sino también una plataforma para la promoción de la diversidad cultural y la
colaboración.
A continuación, se detallan las 19 colecciones que presentarán los
estudiantes en el desfile programado para el 13 de septiembre en el Festival
Música del Caribe:
Adentro: Esta colección de la diseñadora María José Rangel está
inspirada en el mangaka japonés Junji Ito (creador de manga de terror
sicológica basada en lo grotesco), para representar y describir de forma
tangible y visible las ansiedades, tristezas, inseguridades de la diseñadora y
los trastornos mentales de las personas, dando como resultado piezas
inquietantes que generan incomodidad, pero a su vez hacen que los espectadores
no puedan apartar su mirada de ellas.
Koralpa: La
diseñadora Yury Stefany Gómez trae en esta colección una propuesta de
accesorios inspirados en el Complejo Golestán y la isla Rarotonga. La
sostenibilidad es la clave, con un enfoque en la estructura de los accesorios y
el uso de la cáscara de coco como material. Koralpa fusiona diseño y conciencia
ambiental de manera única.
Carnalidad: Es una
colección que busca salirse de esquemas convencionales, religiosos, sociales y
culturales, acoplándose a la vestimenta sin género. Las piezas de la estudiante
Sara Valentina Uhia presentan una vista carnal del ser, donde relucen sus
deseos más impuros e insanos de forma natural, desapegada y excesiva. Propone
conceptos como: los siete pecados capitales y el ciberpunk (fusiona la ciencia
ficción y tecnología con movimientos revolucionarios).
Pratique: La
diseñadora Sara Quiceno redefine el vestuario circense por medio de esta
colección inspirada en la magia y el mundo del circo, al llevar la elegancia
del escenario a la vida cotidiana. Esta colección otoño-invierno demuestra que
el estilo no se sacrifica por el clima, incorporando técnicas de abrigo en
telas. La sostenibilidad es esencial, con el uso de retazos de tela y el
enfoque en el patronaje cero waste.
Dynamic: De la
autoría de María Camila Cortes, esta colección contemporánea de inclusión
y valor nace de una cooperación conjunta con nuestros ancestros para el
crecimiento del comercio artesanal a nivel nacional e internacional, al exaltar
sus saberes, experiencias y manifestaciones artísticas. Para ello, se tomaron
técnicas, estéticas y diferentes fundamentos de sastrería y prendas clásicas
para fusionar el telar vertical que se emplea principalmente para productos
decorativos, hamacas y chinchorros de descanso.
Kawsay: La colección
de Linda Morocho rinde homenaje a la selva amazónica y su vitalidad.
Kawsay, que significa "vida" en lengua indígena, resalta la
problemática de la deforestación a través de atuendos sutiles que comunican la
importancia de la flora.
Gibson punk: La
colección de Alejandra Villamizar busca demostrar que cualquier estilo
puede ser duradero, reinterpretando su silueta y estética para prevalecer
durante una época y tiempo determinado. Asimismo, genera un balance con una
mezcla de dos estéticas diferentes: la Belle Epoque (elegancia y el
refinamiento) y el punk (desconcierto, confusión y caos) un espejo de la razón
de ser de la mujer en la época antigua y sociedad actual.
Nos cruzamos en el camino: Laura Camila Torres presenta en esta
colección una serie de prendas urbanas diseñadas para el uso casual, inspiradas
en la vida cotidiana, donde cada encuentro es una oportunidad para expresar la
identidad única. Esta colección combina arte y moda con estampados y gráficos
únicos pintados a mano.
Gala out earth: Es
una colección del estudiante Brayan García que rinde homenaje a la técnica de
Paco Rabbane y la dinámica futurista de los años 60, al experimentar con
materiales no convencionales para crear una atmósfera de exquisita
extravagancia, hecha y creada exclusivamente para personas que no se sienten
parte de este mundo y deseen aventurarse a través del universo para descubrir
no solamente nuevos mundos, sino también sus identidades.
Impact Collection:
Esta colección, diseñada por la estudiante Sara Valentina Uhia, abraza
la cultura gravetiense y el nomadismo. Enfocándose en la sostenibilidad,
aprovecha la reutilización de materiales, la versatilidad y funcionalidad de
las prendas. Impact Collection es un reflejo de la individualidad humana,
buscando la liberación personal y la autonomía. Inspirada en el movimiento Workwear,
combina el denim con la cuerina sintética y cuero natural para crear un
equilibrio entre lo único y lo funcional.
Irene: De autoría de
Alejandra Huertas Quiazúa, aquí expone la representación de la mujer
como aquella que trae paz, adquiere valor propio por las experiencias que ha
vivido y que han sido de importancia. Lleva consigo un mensaje interno y
externo de coraje que se interpreta no solo por sus acciones y diálogo, sino
por medio de la vestimenta.
Black Vibranium: La
colección creada por Yury Stefany Gómez, transporta a un mundo de
distopía inspirado en el universo Marvel y la vestimenta de los indígenas
Masai. La premisa es intrigante: después de que un meteorito robótico cae a la
Tierra, la humanidad se divide y se ve forzada a transformar los restos del
meteorito en un metal poderoso para sobrevivir. Las prendas representan la
fusión de la tecnología y la naturaleza, utilizando retazos de materiales
textiles de muebles, cuero y peluche.
Salvaje: Es de
autoría de María Camila Buitrago en colaboración con Sauco (una marca
que apuesta por rendirle tributo a la naturaleza, destacando la belleza que se
encuentra en los animales, flores y paisajes que componen la fauna colombiana).
Esta colección busca resaltar la perfección de la naturaleza y la lucha de ella
por sobrevivir en un mundo apocalíptico, proponiendo diseños sobrios y
elegantes.
Miel: Esta colección
de Yulieth Carolina Ramos celebra la belleza natural y la importancia de
las abejas en el ecosistema. Con su enfoque en la biodiversidad, Miel resalta
la variedad de vida en el planeta y la interconexión entre especies.
Destruido: Esta
colección de Stephania Meza reúne el concepto de lo destruido de una
época post apocalíptica, por medio de colores neutros y apagados, así como por
medio de desgastes y la superposición de prendas; sin dejar de lado la
comodidad con piezas holgadas y oversized.
Exhumar: La
colección de Erika Guevara es una exploración que fusiona la música sinfónica,
el modernismo abstracto, la geometrización y la esencia del tomboy. Inspirada
en los instrumentos musicales, los colores y las notas, la colección captura la
armonía visual de la música en sus piezas. Se nutre de la paleta de colores, la
abstracción y las emociones del arte para dar vida a estampados y prendas únicas.
World of colors: Es
una colección de María Paula Ortega, quien utiliza diferentes textiles
como el shelter, lino flex, cuero sintético, dril twill, algunas intervenciones
como la sublimación, el desflecado y el pachwork, muchas tonalidades y combinación
de colores, lo que da como resultado prendas muy versátiles, subversivas y
cómodas que al momento de usarlas pueden generar una seguridad única.
Metamorfo: La
colección de Erika Guevara es una fusión de la estética Eddy, la vanguardia
moderna y el arte abstracto. Se inspira en el concepto del alter ego y explora
la reutilización de materiales no convencionales, junto con procesos
sostenibles que reducen el impacto ambiental. Transmite un poderoso mensaje
sobre la belleza de la imperfección, la autenticidad, la renovación y la fuerza
mental, a través de una paleta de colores, texturas y estampados contrastantes,
el uso de biotextiles como los biocueros y la implementación de neumáticos
reutilizados como material.
Munay warmi: La colección de Tatiana Meléndez toma como
referencia las formas, colores, texturas e historias de las obras del artista
colombiano Benjamín Jacanamijoy perteneciente a la cultura Inga, quien plasma
los recuerdos, sentimientos y experiencias de este pueblo olvidado por los
colombianos. Cada una de las piezas fue teñida de forma artesanal y con tintes
naturales (cúrcuma, achiote, mora y remolacha).
Fuente: Laura Ximena Orjuela
Jefe de Prensa
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diagramación: bersoahoy.co