Encuentre la respuesta a lo que busca sin éxito

En las gráficas el ingeniero y periodista Jairo Alfonso Martínez Gómez

Por Bernardo Socha Acosta

Colombia.
Las crónicas de temas de autoayuda son el pasatiempo preferido de muchas personas que aun cuando no estén habituadas o convencidas de los alcances de estos argumentos, momentáneamente y sin percatarse encuentran respuesta a lo que están buscando para aliviar situaciones personales o ayuda para otros.
Por esta razón nuestro invitado en la red, es el profesional de la ingeniería, Jairo Alfonso Martínez Gómez, director del periódico "El compás" de la capital de Santander.
Es un medio de comunicación escrito que encierra una riqueza intelectual y espiritual, por el contenido, especialmente las narraciones de la salud, los temas metafísicos, la espiritualidad y las historias. Igualmente incluye la sana crítica que ayuda sin duda a los procesos de la vida cotidiana.
Bueno y hablar con Jairo Alfonso, disfrutando de un buen tinto en la cafetería de la Triada de Bucaramanga, es algo más que un diálogo. Es un aprendizaje práctico porque a medida que se desenvuelve el diálogo, se siente esa satisfacción sicológica enriquecedora de lo que se dice. Y sin más preámbulos, le preguntamos a Jairo Alfonso Martínez:

¿Qué lo motivó primero para hacerle frente a este tipo de periodismo...?

Es evidente que en una proporción muy importante los seres humanos de la actualidad intuyen, y creo que esa es la palabra correcta, que hay unos fenómenos, unas leyes, unos principios que no han sido declarados explícitamente pero que constituyen razones mucho más de fondo para entender los sentimientos, las relaciones, la vida en general. La gente, en la medida en que las situaciones externas –políticas, económicas, sociales- son más caóticas, injustas o desesperanzadoras, y viendo que por ese camino las cosas no van a mejorar, empieza a buscar los medios que le provean el conocimiento “oculto” que le permitan despejar la niebla y tener y viajar a un horizonte mucho más despejado y amplio.

Esta es la razón de ser y de hacer de EL COMPÁS, un periodismo útil que deje a quien lee sus páginas una mayor luz, un mejor entendimiento sobre lo que es y puede el ser humano, un mensaje positivo sobre una realidad que es muy diferente a la que de común se nos muestra pero, también, que funde en la gente la certeza de que vivir, y vivir bien, es mucho más fácil de lo que siempre nos dijeron.

En calidad de ingeniero, no siente que choque el trabajo de la comunicación escrita, con su profesión...

Las leyes genéticas, de que tanto se habla en estos días, nos dicen que somos el producto de millones y millones de antepasados que “contribuyeron” para llegar a ser lo que hoy somos. Así, todos tenemos prácticamente la herencia genética de la humanidad, la posibilidad de heredar un problema del corazón o tener una inteligencia superior, de sufrir del hígado o desarrollar una gran habilidad para la música.

Lo que es lógico, natural, es que así como hemos heredado de los ancestros todas las facultades físicas y orgánicas, también, en esos genes, esté comprendida la capacidad para realizar cualquier función, todo tipo de trabajo. Mire, quizás a muchos de nosotros ha pasado que de pronto “sentimos” que queremos hacer algo diferente a lo que hacemos, que eso nos gustaría más que nada… bueno, un día en mi oficina de ingeniero yo sentí eso por la comunicación y no lo pensé dos veces, empecé a escribir y aquí me tienen. En lo fundamental, hago lo que me gusta, lo que me genera un gran placer y todo lo demás viene por añadidura.

¿Por qué adoptó unas secciones especializadas sobre temas de autoayuda...?

Todo está en nuestro interior, tenemos dentro todas las capacidades y todas las respuestas. El asunto es comprender que nadie nos va a tocar y nos transmite sabiduría, entendimiento, felicidad; tampoco es algo que pueda comprarse con dinero o conseguirse con “honores” públicos que tanto buscan muchos hombres y envidian los más.

Es una cuestión personal, íntima, el ir descubriéndonos y elevar nuestro grado de conciencia. Fíjese, Bernardo, que hoy nos encontramos y hablamos solo un corto rato pero quizás una palabra mía haya tocado una fibra sensible suya y haya comprendido algo que pasa en su vida y ahora, con esa comprensión, usted vivirá un poco mejor, más firme, más cierto.

Esa es la razón de este tipo de secciones en EL COMPÁS, facilitar que la gente tenga acceso a esas palabras, a esas “chispas”, que pueden cambiarle la vida para bien. Ahí tenemos una riqueza muy grande, sólo que se mide en una escala muy diferente a la convencional.

¿Cómo cree que los lectores asimilan estos temas...?

La demanda por el periódico que se incrementa número a número, la petición de los lectores de más temas de este tipo, expresiones como “Me han salvado la vida”, la curación de enfermedades que se creían terminales con la simple programación del elemento agua, que documentamos y presentamos a los lectores, que a su vez ponen en práctica estos conocimientos, son muestras de la receptividad que tiene este tipo de informaciones, esta forma de periodismo.

Hace cinco meses produjimos una edición con “El Secreto”, un compendio sobre cómo debe entenderse nuestra relación con el Universo y cómo los grandes hombres, desde tiempos muy antiguos, han utilizado este conocimiento para lograr grandes hazañas, grandes cambios, que puede lograr cualquier persona, usted, yo, el que nos lea. Pues bien, después de cinco meses todavía nos llegan correos de todas partes del mundo pidiéndonos esta información. Esta es una prueba palpable de que transitamos por el camino correcto.