La Navidad, la época más alegre del año.

Los católicos, deben cuidarse de la mala interpretación del Apocalipsis.

El mes de diciembre que reúne una serie de celebraciones, es un periodo especial para el mundo católico, para Colombia y para la sociedad, declaró el dirigente seglar y abogado especializado en derecho canónico, Gonzalo Afanador Afanador.
Las festividades se hincaron con la noche de las velitas (8 de diciembre) como preámbulo a la alegría que representa la conmemoración del advenimiento del salvador. Por esta razón debe ser un motivo de regocijo y oportunidad para dar gracias al Creador por los beneficios recibidos, sostuvo.
Es necesario también -explicó- que esta época sirva para reflexionar sobre los hechos de guerra que están ocurriendo.
Este mes de diciembre está rodeado de muchos hechos importantes, como la novena de la Inmaculada que acaba de terminar, también se cumplió la tradicional noche de las velitas, como víspera de la celebración de la Inmaculada concepción cuando la Iglesia celebra a la Virgen María ese acontecer.
Luego viene la novena de Aguinaldo que es oportuna para que las familias se congreguen alrededor del pesebre para conmemorar el mayor acontecimiento histórico como la venida del Niño Dios, hace más de dos mil años. La Navidad es un acontecimiento especial para la Iglesia católica, porque recuerda cómo con este acontecimiento se dividió la historia de la humanidad en dos, conocidos como el antiguo y el nuevo Testamento, indicó el abogado Gonzalo Afanador. Agregó que la situación que vive el mundo con las guerras, no debe causar trastornos en la alegría que embarga a cada uno de los católicos. Hay que superar esos hechos negativos para poder disfrutar de las celebraciones de este final de año, dijo.

La grafica registra un pasaje del apocalípsis.
La Apocalipsis
Las predicciones que se hallan en el último libro de la Biblia, conocido como Apocalipsis, son anuncios para el futuro que no sabemos cuándo se van a registrar, y por lo tanto se deben tomar con sumo cuidado, para no caer en equivocaciones. La interpretación de esas predicciones deben estar en manos de personas versadas en la materia, como los teólogos y los sacerdotes que han hechos estudios sobre el tema, para evitar errores, como los que señalan que el fin del mundo está por llegar y hasta fijan fechas sobre acontecimientos trágicos.
Los católicos debemos ser prudentes y seguir el cumplimiento de los mandatos Divinos, sin adelantarnos a los acontecimientos. Por eso es necesario el cumplimiento del decálogo de los diez mandamientos de la Ley de Dios.

Los errores al pretender interpretar el Apocalipsis
Sostuvo el seglar, Gonzalo Afanador que los errores al pretender interpretar el Apocalipsis, son graves para las personas y ya se han visto casos. Igualmente los falsos profetas que dicen interpretar el Apocalipsis, causan graves daños a la humanidad, haciéndola precipitarse en procedimientos erróneos que afectan el normal desarrollo de sus vidas, advirtió el abogado Gonzalo Afanador